TRIDUO A NUESTRO PADRE SAN BENITO
REFLEXIÓN
San Benito habiendo consagrado su vida a la búsqueda constante de la voluntad de Dios, se convierte en Padre del monacato occidental y de la Cristiandad. Su modo de vida, inspirado en la doctrina y ley de Dios, que quedará reflejado en la Santa Regla, servirá de base para la construcción de la civilización y cultura de Europa. Inculcó ante todo la primacía de la Gloria de Dios y de los bienes sobrenaturales por sobre los humanos y terrenales. Enfatizó también, la salvación de las almas y la conversión de los pecadores, el rechazo y separación del mundo, el combate contra satanás, el culto sagrado y la oración en comunidad, el cultivo de las virtudes, la consagración diaria del trabajo, el amor al estudio, el respeto, el orden y obediencia a la autoridad legítima, fidelidad en el cumplimiento del deber y de la disciplina, dura lucha contra los vicios y malas costumbres, servicio cristiano a los más débiles y afligidos, enseñar y corregir al prójimo, mortificar la carne, el orgullo, la vanidad y las pasiones, buscar la paz y el silencio. En suma, no anteponer nada a la Gloria de Dios, y agradar a Dios en todas las cosas.
SÚPLICAS
Oh, Patriarca de los Monjes, interceded por el Romano Pontificado, por su plena restitución con un Papa de recta y santa doctrina y a todos cuantos tienen un encargo jerárquico y ministerial en la Iglesia de Dios. Rogad a Dios que suscite santas vocaciones sacerdotales y religiosas entregadas plenamente con generosidad a la Voluntad de Dios, socorred a los seglares en esta hora de tinieblas (confusión y abandono) de gran peligro para su fe.
Mirad desde el cielo la viña que plantó vuestra mano, multiplicad y santificad el número de vuestros hijos y que florezca en ellos el espíritu y fidelidad a la Santa Regla. Suplicad por la conversión de los malos católicos que se han alejado de Dios siguiendo al mundo y sus fábulas, también por los rebeldes judíos y de todos tus enemigos, especialmente por aquellos más engañados y dominados por Satanás.
Interceded por la sumisión a Cristo, Rey y dueño del mundo entero, y alcanzadnos a todos vuestros fieles devotos una muerte santa como la vuestra, para que podamos gozar de vuestra compañía en el Cielo, con María Santísima y todos los santos por toda la eternidad.
(Pedid aquí la gracia particular que requerid a la intercesión de San Benito. Luego rezad un Padrenuestro, un Ave María y un Gloria).
Rogad por nosotros Padre San Benito, te lo suplicamos, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Jesucristo Nuestro Señor. R. /Amén.
ORACIÓN FINAL
Señor, Dios Todopoderoso y Eterno que desead ser glorificado en vuestros santos haciéndoles partícipes de vuestro infinito amor y gozo, y de todas vuestras perfecciones. Vos que has ensalzado a vuestro fiel siervo San Benito llenándole del Espíritu de todos los justos y concediéndole gran poder ante Vos para socorred a cuantos le invocan con fe y devoción, concedednos, Señor, por intercesión del glorioso patriarca la gracia de imitar sus virtudes y de recibir su particular protección ante los peligros de la carne, del mundo y del demonio. Por Jesucristo, Nuestro Señor. R. /Amén
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